Terapia Infanto-Juvenil
En que consiste la terapia infanto-juvenil
Los niños y adolescentes a veces muestran comportamientos, actitudes o emociones que pueden preocupar a los padres. En estos casos, acudir a un psicólogo infantil es una opción valiosa para ayudar tanto a los padres a entender mejor la situación, como al niño a canalizar sus sentimientos adecuadamente.
Los niños y adolescentes expresan su malestar de acuerdo con su temperamento y las herramientas emocionales que han adquirido. En Theos Psicología, creemos que la aproximación diagnóstica debe ser útil para comprender lo que el niño está viviendo y aunque nos oponemos al uso excesivo de etiquetas, nos centramos en eliminar los síntomas y resolver el origen y la causa de los mismos.
Algunos niños tienen dificultades de atención debido a situaciones de alerta constante o falta de recursos para enfrentarse a su entorno.
También pueden experimentar rabietas o irritabilidad, ataques de ira, y, aunque esto puede ser parte del desarrollo, los padres pueden aprender a gestionar estas emociones para ayudar a los niños a manejarlas mejor.
La hiperactividad en algunos niños puede estar relacionada con la ansiedad, el temperamento o una causa subyacente. Además, los niños pueden enfrentar dificultades en sus relaciones sociales, ya sea por baja autoestima, comportamientos sumisos o agresivos, o complejos relacionados con su imagen.
Los miedos, inseguridades y problemas de baja autoestima, también pueden desencadenar problemas emocionales, como trastornos de la alimentación, a medida que los niños crecen. Además, pueden experimentar síntomas psicosomáticos, como dolores de cabeza o vómitos, derivados de malestares emocionales no expresados adecuadamente.
También ponemos en foco en un abordaje contextual, es decir analizamos los factores y actores que están manteniendo la problemática del niño, preadolescente y adolescente, problemas de habilidades sociales de relación con iguales, integración, gestión de impulsos y de emociones, autoconcepto y autoestima, son habilidades esenciales que desarrollamos en todo proceso de intervención terapéutica con menores.
Cuando nuestros hijos enfrentan experiencias traumáticas, pueden mostrar signos como irritabilidad, miedos o ansiedad. Es importante que los adultos los acompañen para ayudarles a afrontar estos eventos, como un divorcio o la pérdida de un ser querido.
En Theos Psicología, creemos que los padres son fundamentales en el proceso de cambio del niño y del adolescente, por lo que su colaboración con el psicólogo es clave para el éxito del tratamiento. Reconocemos que cada niño tiene un desarrollo único, por lo que abordamos sus necesidades de manera personalizada.
A lo largo de nuestra vida, las interacciones con los demás, la forma en que percibimos nuestras relaciones, nuestras experiencias personales y los discursos que nos rodean, nos moldean en direcciones que, muchas veces, no elegimos conscientemente. Esto nos lleva a actuar desde el miedo, las expectativas ajenas o, incluso, a quedarnos bloqueados y sin control sobre nuestra propia vida. Son muchos los factores que influyen en esto, y la tarea de la terapia es abordarlos para sanarlos y gestionarlos y puedas redefinir libremente quién eres y el tipo de vida que anhelas seguir.
¿Qué problemas tratamos?
- Problemas de Comportamiento y Desobediencia
- Problemas de Aprendizaje y Fracaso Escolar
- Ansiedad
- Depresión
- Ansiedad Social
- Miedos y Fobias
- Abuso sexual y maltrato
- Manías y Obsesiones
- Aislamiento Social o Dificultad para Relacionarse
- Problemas de alimentación
- Trastorno Negativista y Desafiante y Trastorno de Conducta
- Trastorno del Espectro del Autismo (TEA)
- Trastornos de la excreción
- Baja Autoestima
- Anorexia y Bulimia
- Trastornos del Sueño
- Tics y Hábitos Nerviosos
- Superación de Duelos y Separaciones
- Bullying y Acoso Escolar
- Enfermedades crónicas en la infancia (asma bronquial y diabetes)
- Dolor crónico y procedimientos dolorosos en la infancia
Otros servicios
- Custodia de Menores
- Informes Psicológicos y Periciales
¿Cómo trabajamos?
En la psicoterapia infanto juvenil, el primer contacto generalmente lo realizan los padres, y la primera entrevista se lleva a cabo con ellos para obtener la información necesaria sobre la historia del niño, el motivo de la consulta y otros detalles relevantes. Esto permite diseñar un plan de evaluación personalizado para el caso. Posteriormente, se realizan varias sesiones de evaluación con el niño, utilizando diferentes herramientas, que pueden incluir entrevistas, tests, pruebas y juegos, dependiendo del repertorio verbal que el niño pueda manejar.
Una vez completada la evaluación, se realiza una sesión de devolución con los padres, donde se presenta la propuesta de intervención y se les ayuda a comprender la situación de su hijo y las causas de su problemática específica.
Trabajamos con niños desde los 3 años o desde el momento en que desarrollan un nivel verbal adecuado. Dependiendo de la edad y las circunstancias, la intervención se puede realizar directamente con el niño o a través de sesiones de orientación con los padres, proporcionándoles pautas y herramientas para gestionar la situación.
En algunos casos, cuando el niño es muy pequeño, no podemos trabajar directamente con él, pero los padres pueden acudir en busca de orientación sobre pautas de crianza.
Cuando el paciente es un adolescente, evaluaremos, según el motivo de la consulta y la edad, si la primera entrevista se realiza con los padres o directamente con el adolescente. Esto nos permite asegurar una buena conexión con el paciente y definir el enfoque adecuado para la terapia.
En todos los casos, adaptamos nuestro enfoque a las necesidades específicas de la familia y del niño, trazando un plan de evaluación e intervención que consideramos más efectivo y beneficioso.
